Boletín de Prensa
A los usuarios capitalinos del servicio público de energía eléctrica,
A las fracciones parlamentarias representadas en el Congreso de la Unión,
A las organizaciones sindicales, sociales y políticas,
A los medios de comunicación nacionales y extranjeros,
Al pueblo mexicano,
Salud:
El 11 de noviembre del presente año, como una lóbrega forma de conmemorarse trece meses del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro, estallaron varias bóvedas subterráneas del centro histórico de esta ciudad de México con las consecuencias ya reconocidas de doce heridos, varias horas de suspensión del servicio eléctrico y la afectación de la vida económica, productiva y social, de esa importante área de nuestra capital federal. Dos días más tarde, el 13 de noviembre se produjo otra explosión en el primer cuadro de esta ciudad.
Con estas explosiones en las instalaciones de la Red Automática Central, se demuestra que tanto la Comisión Federal de Electricidad (CFE), supuesta empresa de “clase mundial”, como sus empresas contratistas, son totalmente incapaces de prestar el servicio público de energía eléctrica en condiciones de eficacia, eficiencia y oportunidad. Así, tan solo en lo que va del año se han incrementado en más de un 500 por ciento, para un total de 152 disturbios (nombre técnico con el que se denomina a este tipo de eventos en la red eléctrica) según datos oficiales de la Secretaría de Protección Civil del Distrito Federal, la cual en voz de sus titular, ha descartado por completo cualquier acusación de sabotaje, a la que están tan acostumbrados los funcionarios federales del cártel de la electricidad.
De este modo, el 15 de noviembre, diversos legisladores capitalinos miembros de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), anunciaron que no darán un solo peso a la CFE para asegurar el buen funcionamiento de la red eléctrica del primer cuadro. Ello en virtud de que los “chicos de la lucha contra la corrupción” de la CFE, aseguran que para garantizar el mantenimiento y la modernización del cableado subterráneo del primer cuadro se requeriría un presupuesto del orden de mil millones de pesos y de que se tendrían que ir a partes iguales, entre el gobierno del DF y la propia CFE.
Nadie sabe, sin embargo, si ese presupuesto es para contratar personal de empresas extranjeras o para echar mano de esquiroles de LyFC. Ello, cabe señalarlo, porque CFE carece en absoluto del conocimiento y la experiencia técnica suficiente y necesaria, puesto que las únicas instalaciones de Red Automática de nuestro país se encuentran dentro de la zona de LyFC, por lo que CFE desconoce totalmente el funcionamiento de dichas redes.
Ante estos acontecimientos, nuestra Organización Sindical con la responsabilidad y el compromiso que nos caracterizan, convocamos a las fracciones parlamentarias representadas ante el Congreso de la Unión para que aceleren la discusión y aprobación de creación de un nuevo Organismo Público Descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios, que sustituya a LyFC y podamos a la brevedad posible, darnos a la tarea de organizar el diseño y la realización de los planes y programas de Mantenimiento Preventivo y Correctivo para dichas Redes Automáticas.
Ante los usuarios de la zona central del país, nos comprometemos a efectuar las reparaciones necesarias e indispensables de nuestras redes, aprovechando la mano de obra calificada de trabajadores activos e incluso de nuestros jubilados que conocen, hasta con los ojos cerrados, dichas instalaciones y nos comprometemos a hacerlo, incluso sin ningún reclamo de tiempo extraordinario para los activos y sin ningún ingreso para nuestros jubilados, como una aportación voluntaria ante el desastre causado por el decreto calderoniano de extinción de LyFC.
Fraternalmente
“Por el Derecho y la Justicia del trabajador”
México D.F. a 16 de noviembre de 2010
COMITÉ CENTRAL
Y
COMISIONES AUTÓNOMAS
SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS
Responsable de la publicación Fernando Amezcua Castillo, Secretario del Exterior
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